No podemos dejar de fantasear sobre viajar a mundos exóticos y lejanos. Pero en el mismo planeta tierra tenemos la suerte de poder escaparnos a lugares que parecen de otra galaxia. Si tienes ganas de una experiencia fuera de lo imaginable, ¡Estos son los 7 destinos más surrealistas que hemos encontrado en Europa!
Parque Nacional de Timanfaya, Lanzarote, España
Parece Marte. O la luna. De naturaleza volcánica, en el interior del Parque Nacional de Timanfaya se pueden observar una gran variedad de fenómenos geológicos así como una gran diversidad biológica que alcanza a 180 especies de vegetales distintos. Se trata de un hábitat donde la presencia humana ha sido prácticamente nula, siendo un auténtico laboratorio de investigación geológica. Una experiencia inolvidable, a solo unos km de la playa.
Giant´s Causeway, Reino Unido
Durante siglos, innumerables visitantes se han quedado boquiabiertos ante la majestuosidad y el misterio de Giants Causeway. En el corazón de una de las costas más magníficas de Europa, sus formaciones rocosas han sido, durante millones de años, una muralla natural contra la ferocidad desenfrenada de las tormentas del Atlántico. La simetría de las columnas nunca deja de intrigar e inspirar a nuestros visitantes. Pasear por la Calzada de los Gigantes es como viajar a otro planeta.
El Bosque Torcido, Polonia
¿Pasear por un bosque animado en un cuento de hadas? Esta arboleda de aproximadamente 100 pinos fue plantada alrededor de 1930, cuando su ubicación todavía estaba dentro de Alemania. Todos los pinos parecen doblados, justo sobre el nivel del suelo, curvándose hacia atrás. Se cree que se utilizó alguna herramienta o técnica humana para hacer que los árboles creciesen de esta manera, pero el método y el motivo no se conocen en realidad.
Torri del Vajolet, Dolomitas, Italia
¿Un escenario de película de ciencia ficción? No, es el norte de Italia. Las torres de Vajolet (2.821 m) son un conjunto de siete pastos de montaña en las Dolomitas. Forman un conjunto espectacular y amado por turistas de toda Europa, especialmente alpinistas y aficionados al trekking.
Dune du pilat, Francia
La Duna de Pilat es con diferencia la duna más alta de Europa. Pero la altura no lo es todo. Lo más especial del recinto es su ambiente fascinante y su impresionante panorama. A esto se le añaden sus formas colores que varían con el tiempo, la luz, la sensación de inmensidad y la libertad que hace sentir al mirarla.
Cappadocia, Turquía
Paisaje único en el mundo, Capadocia es una maravilla milagrosa de la naturaleza, en la región central de Anatolia. Como resultado de las erupciones volcánicas ocurridas en Erciyes, Hasandag y Gulludag, en la región se formó una gran meseta de las tobas volcánicas y junto con la erosión del río Kizilirmak y el viento más de diez mil de años después aparecieron las rocas de la chimenea que conforman hoy Capadoccia.
Un placer para los sentidos.
7. Los fiordos, Noruega
Impresionantes, especialmente en invierno. Hay más de mil fiordos en Noruega, a lo largo de la costa. Pero la mayoría de los íconicos, los que puede haber visto en las postales, como el Nærøyfjord, el Sognefjord, el Lysefjord the Geirangerfjord, se encuentran en la costa oeste. Los fiordos se asemejan a lagos azules, pero largos y de agua salada. A menudo alcanzan metros de profundidad y se combinan con majestuosos acantilados que se elevan por encima en ambos lados. En las partes más al norte si tienes suerte, puedes ver la aurora boreal.